El mundo está averiado. Existe no sola una sino una serie de crisis interconectados que impide la solución de las demás. Esto es algo nuevo: Simultáneamente la economía está constreñida, el clima está amenazado, la naturaleza y los recursos naturales están bajo presión, el desempleo está aumentando, la estabilidad social está en peligro y la desigualdad está creciendo en muchos países.
Somos 50 personas de la generación que tiene que asumir la sociedad de hoy día, y asegurar un futuro para nuestros hijos. Nosotros tenemos mucha esperanza y somos listos para asumir la responsabilidad. Pero estamos profundamente preocupados de la falta de reconocimiento entre los tomadores de decisiones de las crisis interconectadas. Están tratando de resolver los problemas del presente con las respuestas del pasado.
[/vc_column_text][/vc_column][vc_column width=”1/2″][vc_column_text]Con diferentes orígenes, una gran variedad de destrezas y un compromiso fuerte reunimos el día 23 de Febrero 2013 para poner en palabras nuestra ansiedad y la visión del desarrollo sostenible de nuestra generación.
Enfrentamos desafíos históricos que requieren una transición histórica. Con este apelación, llamamos a la Comisión Europea y los miembros del Parlamento Europeo a levantar los ojos, reconocer la necesidad de cambios fundamentales, y unirse a nosotros en allanar el camino para un futuro sostenible. El mundo está averiado – lo arreglamos juntos.
[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column width=”1/1″][divider_line type=”divider_line”][vc_column_text]El Problema
[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column width=”1/2″][vc_column_text]El sistema económico global está agrietando. Una población mundial creciendo y el aumento de la riqueza material nos ha llevado a un lugar donde la economía global excede los límites planetarios. En lugar de vivir de lo que la naturaleza nos provee cada año, estamos usando de las reservas – como comiendo las semillas porque el granero está vacío
Esto ha socavado las posibilidades de crecimiento perpetuo, que ha sido el prerrequisito de la riqueza los últimos doscientos años. En cambio hoy experientamos estancamiento económico, desempleo, desigualdad y inestabilidad política en nuestra parte del mundo. Es como si los esfuerzos para crear progreso económico a través de medidas tradicionales están obstruyendo el mismo progreso. Estamos atrapados en un círculo vicioso.
Este es especialmente evidente en la manera en que tratamos los recursos naturales y los ecosistemas. La búsqueda interminable de más petróleo, gas natural y carbón, nos conduce al agotamiento de las reservas y el aumento de los precios, pero también al aumento de los costos ambientales y climáticos. La búsqueda de ganancias de corto plazo socava la posibilidad de sostenibilidad en largo plazo. El hecho que no pagamos el precio correcto de los combustibles fósiles y otros recursos significa que generaciones futuras van a pagar un precio insoportable.
Hoy día irresponsabilidad ambiental es rentable. Los contaminadores no pagan lo suficiente.
El largo periodo de crecimiento continuo de la economía global no ha logrado reducir la desigualdad entre las personas, y después de la recesión económica la desigualdad ha crecido aún más. Junto con el desempleo aumentando esto erosiona la cohesión social y debilita la confianza en el sistema político y a los tomadores de decisiones. Este desconfianza se convierte en un barrera para la innovación y los reformas visionarios que podrían llevarnos en el camino hacia la sostenibilidad.
En cambio actuamos en corto plazo. Ejemplificado por las empresas que producen productos con poca durabilidad o obsolescencia planificada, por políticos que evitan la regulación ambiental necesaria con el fin de asegurar su propia posición, o que animan a los ciudadanos de aumentar su consumo, sabiendo que el aumento del consumo material socava nuestros medios de vida en el largo plazo. Temiendo la crisis, bajo de presión de la competencia, amenazado por el desempleo y fastidiados por la desigualdad nos vemos forzados a actuar al contrario a nuestras convicciones más profundas.
[/vc_column_text][button title=”Bajar la Apelacióncomo PDF (en inglés)” type=”custom” back_color=”#a1d100″ color=”green” url=”https://www.omstilling.nu/wp-content/uploads/2013/09/Transition-now.pdf” target=”_blank”][/vc_column][vc_column width=”1/2″][vc_column_text]Fuera como no podemos reconocer lo que es bueno para nosotros. Utilizamos una medida abstracta del progreso y convencemos a nosotros mismos que esta medida nos indica el bienestar. Medir la riqueza con el PIB equivale a medir el flujo de agua en un río – pero la cantidad de litros que fluya no nos diga nada sobre la calidad del agua; si fuera limpia o contaminada, o si contiene pescados o tóxicos.
Devolver la sostenibilidad ambiental, el bienestar verdadero y la cohesión social al centro de la política y el desarrollo requiere que repensamos la medida de progreso, una reforma de la medida del PIB.
Pero no todo puede ser medido; el sentido de la comunidad y la cohesión social, por ejemplo.
El ser humano moderno es frecuentemente disociado de la naturaleza, y bajo de la ilusión de ser independiente de esta misma. ‘Los recursos escaseces de la naturaleza pueden ser sustituidos, y la tecnología puede asegurar el continuado agregación de valor,’ suena la justificación consoladora de los economistas. Y puesto que lo que hacemos contra la naturaleza no implica consecuencias inmediatas para nosotros – por ejemplo cuando las emisiones de CO2 en Europa provocan la sequía en África con diez años de retraso – es tentador decir a nosotros mismos que no tiene nada que ver con nosotros. Lo que hacemos y lo que sabemos profundamente al interior no coinciden.
Esto es también el caso para las relaciones entre las personas. En una sociedad penetrado por la competencia y bajo la presión de la crisis, progreso individual y estatus material son criterios centrales del éxito. Individuos, divisiones de la población y países luchan entre si para las oportunidades, empleo, recursos y el espacio que todavía queda. Cohesión social y el sentido de la comunidad se desintegran.
Si queríamos superar la crisis sistémica, todos tendríamos que ser parte de la transición. El desafío tiene que ser articulado y reconocido en su totalidad y complejidad – no sólo como problemas individuos aislados. Los políticos deben encontrar el coraje para expresar sus visiones y mostrar liderazgo – no estar perseguido de la agenda de corto plazo, sondeos cambiando o la media escandalizando. Empresas deben comprometerse a la responsabilidad social y ser buenas ejemplos – no proteger la situación actual y los intereses personales estrechos. La gente debe ser involucrados como ciudadanos activos y responsables – no sólo dirigida desde arriba como consumidores, asalariados y receptores de beneficios públicos.
[/vc_column_text][blockquote type=”blockquote_line” align=”left”]La transición empieza en nuestras corazones y mentes.
[/blockquote][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column width=”1/1″][divider_line type=”divider_line”][vc_column_text]Las Soluciones
[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column width=”1/2″][vc_column_text]Los desafíos son muchos y profundos. Quedamos lejos de saber todas las respuestas. Pero tenemos lo voluntad y el poder de estar parte de la transición. Estamos convencidos que un camino sostenible es posible. Tenemos la impresión que será reviviente, emocionante y divertido.
Confiamos en La Comisión Europea como un modelo – un laboratorio donde inspiramos uno a otro.
A continuacón salen unas sugerencias de soluciones y nuevas iniciativas:
[/vc_column_text][/vc_column][vc_column width=”1/2″][vc_accordion active_tab=”false” collapsible=”yes”][vc_accordion_tab title=”El consejo de la transición” color=”green”][vc_column_text]El consejo de la transición sería un consejo multidisciplinario de especialistas, con la autoridad de dar consejos a los políticos y calificar las decisiones necesarias para iniciar y continuar la transición sostenible de la sociedad. El consejo debería articular visiones holísticas de la transición regularmente en cooperación con la sociedad civil, y dar recomendaciones y pautas del desarrollo societal sostenible.
[/vc_column_text][/vc_accordion_tab][vc_accordion_tab title=”El Exploratorium” color=”green”][vc_column_text]El exploratorium es un proyecto que contribuye al desarrollo y pruebas de nuevas tecnologías y soluciones creativas en coherencia con las necesidades locales y las iniciativas de los ciudadanos. El proyecto sería financiado por el estado y provee crédito y asesoría para emprendedores con nuevas ideas de producción socialmente y ambientalmente sostenible.
[/vc_column_text][/vc_accordion_tab][vc_accordion_tab title=”Una reforma fiscal ecológica” color=”green”][vc_column_text]Una reforma fiscal ecológica consistiría de un aumento de los impuestos al daño ambiental y una disminución de los impuestos al empleo. Impuestos elevados a la contaminación y el consumo de recursos aumentaría los incentivos de eficiencia en el uso de recursos, y impuestos más bajos al empleo aumentaría el empleo.
[/vc_column_text][/vc_accordion_tab][vc_accordion_tab title=”Un PIB verde y social” color=”green”][vc_column_text]Un PIB verde y social incorporará la capital natural y aspectos sociales en las declaraciones anuales de la riqueza total del país. Este medida nueva sería una reforma de la medida del PIB existente, donde se daría un valor monetario a la degradación de la naturaleza y los efectos sociales negativos y lo deduciría del ingreso total nacional.
[/vc_column_text][/vc_accordion_tab][vc_accordion_tab title=”Inversiones verdes” color=”green”][vc_column_text]Inversiones verdes son fundamentales si la transición sería realizada. Al respeto tenemos tres propuestas:
[/vc_column_text][list style=”arrow” color=”green”]- Bajar la tasa de descuento para proyectos de transición sostenible. Esto tipo de proyectos a menudo son fundamentalmente diferente que proyectos de construcción convencionales, debido a los costos de inversiones más altos, costos de operación más bajos, costos ambientales evitados y beneficios de largo plazo. Una tasa de descuento significativamente baja haría este tipo de proyectos más rentables.
- Crear incentivos para los fondos de pensiones para hacer inversiones sostenibles. Los fondos de pensiones poseen activos enormes, que debería ser invertido en proyectos de largo plazo en las áreas de energía renovable, transporte colectivo y la construcción sostenible. Al cambiar el foco de ganancias de corto plazo a inversiones de largo plazo, podría dar espacio al hecho que los más activos serían invertidos en proyectos sostenibles.
- Establecer un banco societal: El banco societal sería un banco de inversiones de propiedad comunitaria con el objetivo de destinar fondos para inversiones sostenibles que crearían empleo permanente. Aquí actores privados podrían colocar sus ahorros con tasas de interés competitivas garantizadas por el estado. Además, los fondos de pensiones serían obligados a colocar un porcentaje determinado de sus activos en el banco.
El servicio nacional, que ahora conocemos como el servicio militar, sería la obligación de cuidar a la naturaleza y a la comunidad. En todos los municipios hay tareas que no atendidos, como la restauración y conservación de la naturaleza y atención a las comunidades locales. El servicio militar existente sería transformado en un servicio de proyectos ambientales y sociales. Esto sería una forma de resolver problemas urgentes que no son rentables resolver en los términos del mercado.
[/vc_column_text][/vc_accordion_tab][vc_accordion_tab title=”Reutiliza otra vez y otra vez y otra vez…” color=”green”][vc_column_text]Reutiliza otra vez y otra vez y otra vez… sería una ruptura con la cultura de usar y tirar, una transición hacia la economía circular, donde se recicla los recursos en circuitos cerrados, y donde los productos serían diseñados para durar el más largo tiempo posible. Ejemplos de maneras de apoyar a este desarrollo son aquilar en lugar de poseer, ampliar el sistema de reciclaje y depósito, y un aumento en los impuestos de recursos y envasos.
[/vc_column_text][/vc_accordion_tab][vc_accordion_tab title=”Empleo” color=”green”][vc_column_text]El empleo se aumentaría a través de varias de las propuestas ya mencionado, y además propongamos:
[/vc_column_text][list style=”arrow” color=”green”]- Experimentos con el comparto del empleo: Al acortar la semana laboral, nuevos puestos de empleo serían creado basado en la producción actual. El comparto del empleo ha sido criticado por debilitar la competitividad. Por lo tanto sugerimos que comenzamos hacer experimentos del comparto del empleo en profesiones cuales no compiten con otros países. Una semana laboral más corta podría aumentar la calidad de vida del individuo, la familia y las comunidades locales debido a la posibilidad de una mayor participación en las actividades de ocio y de la comunidad.
- Un fondo de empleo juvenil sostenible con el objetivo de crear oportunidades de empleo mediante la financiación de proyectos sostenibles llevados a cabo por personas jóvenes. El fondo sería dirigido a personas bajo la edad de 35 años, recién graduados, desempleados y no calificados, y podría contribuir a la creación de una culturas de emprendimiento próspero y sostenible.
Nuestra agricultura debería ser transformado a un sistema de principios biológicos sostenibles basado en circuitos cerrados donde los nutrientes se quedan en el sistema, donde se detiene la aplicación de químicos, y donde la energía fósil no tomaría parte de la producción. La actividad agrícola debería ser considerado como un guardián de la naturaleza. La monocultura de hoy día, dominado por la cultivación de forraje para la producción de carne, debería dar espacio para una producción más variada, respetando el clima y enfocando a la seguridad alimentaria nacional.
[/vc_column_text][/vc_accordion_tab][vc_accordion_tab title=”La naturaleza urbana” color=”green”][vc_column_text]La naturaleza urbana debería tener más espacio y libertad. Menos carros y menos asfalto darían más espacio a nuevos espacios urbanos verdes. Espacios públicos no utilizados serían transformado a agricultura urbana y jardines ornamentales, mientras que el aumento de la biodiversidad, el transporte público y biciclismo crearía ciudades más amigables para las residentes de varias especies.
[/vc_column_text][/vc_accordion_tab][vc_accordion_tab title=”Sostenibilidad como la nueva normalidad” color=”green”][vc_column_text]Sostenibilidad como la nueva normalidad debería ser promovido a través de una campaña nacional. Los ciudadanos deberían ser involucrados en la transición – calificados, motivados y informados. Por lo tanto, fondos deberían ser asignados a campañas como la campañas de Brundtland de los años 80 y la Agenda 21 del inicio de los años 90. Sostenibilidad debería ser una disciplina obligatoria en todos los colegios.
[/vc_column_text][/vc_accordion_tab][/vc_accordion][/vc_column][/vc_row]